martes, 20 de mayo de 2014

Tormenta sin verano.

Piedras Blancas. Andrea Álvarez Iglesias
Caminabas -tranquilo- bajo la tormenta
que comenzaba en tus ojos
y terminaba en alta mar.

Coloreabas de gris el lugar de donde vengo,
aquel pueblo costero en el que
las tormentas de verano
llegan sin él;
donde la mar golpea las rocas,
las baña
y nos empapa.

Tus ojos a veces eran verdes
-ya no estás-
y otras azules
     -no estás.

Con un pincel dibujo
huellas en mis calles de arena,
-para que no vengas-
y una sonrisa en el aire
-para que al fin
me encuentres-.